Sujeto/Objeto
A 9 de Octubre de 2016. Siglo XXI. Era de lo moderno, las tecnologías y los avances continuos en diversos campos.
Y resulta que aún es fácil encontrarse con personas repugnantes que tratan de objetivar a las personas. Por concretar, a las mujeres.
Está claro el hecho de que aún haya una gran diferencia entre el coste de la entrada de una discoteca para chicos frente al coste gratuito de la entrada para chicas.
¿Que por qué esta discriminación positiva hacia la mujer? Porque somos la diversión de los clientes que esos empresarios de locales nocturnos buscan, los chicos.
Se habla y se tacha a la prostitución de denigrante, de sucio, de algo que es un claro tabú para esta sociedad; pero no vemos que están prostituyendo nuestra dignidad como personas.
Nadie debería sentirse objetivado. Ni chico, ni chica.
Porque ni es justo que ellos paguen tanto por una entrada frente a nuestra gratuidad, ni tampoco es justo que se nos trate de objetos de distracción ni como cebos.
Como si de comida se tratara.
Hoy día te pones a buscar trabajo y debido a como está la situación económica del país, lo más fácil es encontrar algo en un bar de copas, pero da la "graciosa" casualidad que antes de preguntar por tu responsabilidad ante el cargo, te pregunten que físico tienes. Y no hablan de presencia, hablan de curvas. Que se os ven las intenciones "súper empresarios".
Tantos golpes en el pecho de lo empresarios que sois y muy poca educación adquirida en vuestra larga vida.
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